Sexo Tántrico

Técnicamente Tantra  es un culto ritual no eyaculatorio, el paradigma de Tantra es el respeto, la tolerancia, el reconocimiento,la alegría , la generosidad y la gratitud. El reconocimiento mutuo es lo más importante. Es un estado que te lleva a la unidad, es muy físico, muy consciente y erótico.

La intencionalidad de Tantra es que las personas evolucionen en su existencia, teniendo no sólo una mejor sexualidad, sino un mejor vínculo y erotismo. Tantra aporta una manera de acariciar y de respirar diferente, es un replanteo de la sexualidad y de la espiritualidad,  un instrumento de expansión del campo de la conciencia, un camino de liberación para evolucionar y trascender.

Tantra se diferencia del acto amoroso cotidiano por la concentración en la respiración y en conciencia.

Características de la meditación tántrica:

Plano físico: saturar el cuerpo de placer

Plano emocional:concentración en pensamientos amorosos, ceremonia de encuentro y homenaje a nuestro compañero.

Plano espiritual: sentir la unidad en nosotros y en nuestro compañero como una sola unidad, trasgredir los obstáculos y trascenderlos.

Ejercicios y prácticas:

La única postura que no se sugiere es la del misionero(el varón sobre la mujer).En Tantra, la mujer es la que guía sentada sobre su compañero. La clave está en la respiración, cuando la respiración se detiene , el semen se detiene. La eyaculación va  siempre precedida de una aceleración del pulso, entonces  tienes que respirar lento y pausado.

Durante la masturbación o mientras te encuentres penetrando a tu pareja, debes centrarte en la respiración consciente. Cuando una pareja se inicia en esta práctica, debe evitar todo exceso de excitación. Comenzar por la periferia sutilmente, acariciarte y reconocerte en el otro.

Primero una penetración suave y una profunda. Luego dos suaves y una profunda, así hasta alcanzar diez suaves y una profunda.

Experimentar el método de retirarte duro y volver a penetrar blando, evitando la impaciencia para lo sexual. Es tu enemiga.

Es un re-aprendizaje para contactarte conscientemente con la sensibilidad dormida o anestesiada de tu cuerpo. Con esa modalidad de penetración , el canal vaginal expande el radio sensorial.

Todos los movimientos son apropiados mientras no provoquen el reflejo eyaculatorio. Des-condicionarse implica práctica y cooperación de ambos, Al principio puede resultar tedioso cambiar el ritmo y estar conscientes de la respiración y meditación.Pero con la práctica se llega.

Tantra se practica en el piso sobre acolchados y rodeados de muchísimos almohadones.

Una práctica en pareja:

1)Una ceremonia de encuentro es cuando la pareja se ubica frente a frente y con cierto espacio para observar. La mujer es la iniciadora. Hasta no estar en Conciencia pura no comienza. se recorrerá su cuerpo con todas las partes de su cuerpo, suave, sin apuro, sin buscar un resultado, sólo sentir placer  y entrar en comunión consigo misma.

2) Cuando finaliza, su compañero repite sobre el cuerpo de la mujer aquello que observó. Más importante que recordar exactamente las secuencias, es fundamental repetir la intensidad de esa mujer, si hay diferencias de presiones, si advierto una posición recurrente, con qué liviandad en tiempo y espacio se recorre a sí misma.

3) Luego comienza el varón, se empodera de su masculinidad y placer, recorriendo zonas de su cuerpo con partes de su cuerpo. Significa que, si utiliza la mano, se recorrerá con todo el territorio de su mano. Lo mismo realiza la mujer que como iniciadora abre el camino del ritual, de la ceremonia, del homenaje. Cuando el varón decide finalizar, entra en silencio corporal. Es la compañera ahora, la que reproduce lo observado en el cuerpo del otro.

4) Esta práctica en un principio armoniza nuestras dualidades internas. Por otro lado reconocemos los gustos, intensidades y zonas de nuestro compañero. Uniendo las dualidades masculinas y femeninas. Y se logra entrar en comunión con el otro, descubriendo cuánto hay aún por descubrir del compañero.

A practicar!!

Extracto del Libro » Tantra para occidentales» de Olga Tallone

Lic. Dolores Rueda

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