Eyaculación Precoz

 

Causas y consecuencias

Uno no nace sabiendo

Si la pulsión es innata e inconsciente, el erotismo, con todos sus ingredientes, requiere aprendizaje, como cualquier aspecto de la vida.

La primera vez que una persona tiene un orgasmo, este la toma por sorpresa, sencillamente porque hasta entonces ignoraba qué sentiría y qué lo precedería, por más libro de educación sexual que haya leído y charlas  escolares o familiares que haya sostenido con adultos. En los inicios del ejercicio de la sexualidad, chicas y chicos desconocen  las respuestas de su cuerpo, no identifican las sensaciones percibidas y, además, están preocupados por cosas ajenas al acto en sí, como hacer un buen papel, no ser descubiertos, cuidarse de un embarazo indeseado, etc.

Es corriente, y muy lógico, que en esta etapa los varones eyaculen con gran rapidez y las chicas no lleguen al clímax. Ambas adquieren la categoría de problema cuando perduran a través del tiempo. En términos generales, podría decirse que el eyaculador precoz crónico o primario es un hombre que ha permanecido fijado en esa etapa de iniciación y no es propiamente incapaz de controlar su placer, sino que todavía no ha aprendido  a hacerlo.

La repetición de la escena sólo contribuye a agravar el inconveniente con el agregado del temor. En los casos de eyaculación rápida secundaria y circunstancial, participan otros elementos puntuales, como culpas, miedos, stress, desavenencias con la pareja, etc. Cualquiera de estas dos clases de eyaculación precoz se puede convertir en permanente si el sujeto cree que está  “enfermo”.

Si por cualquier razón, durante un tiempo el hombre no encuentra la necesidad de aprender nada, o no desea admitirla, al enfrentarse con la realidad aparecerá el elemento menos afrodisíaco del mundo: la ansiedad, consecuencia y causa de una dificultad que se irá agravando en un verdadero círculo vicioso.

Un factor decisivo es interpretar cada encuentro sexual como una demostración de habilidades y pericia. Se ven afectados con el desempeño opuesto al deseado, los individuos inseguros de sí mismos, que han sido formados en un ámbito competitivo y relacionan su potencia y capacidad de dar placer con la valoración personal, o bien aquellos preocupados en exceso por la satisfacción de su compañera, o inhibidos por una pareja muy sensual, apasionada o con más experiencia que ellos mismos.

Desaprendizaje, o eyaculación precoz secundaria y circunstancial

La ocurrencia de un episodio aislado de descontrol no determina por sí misma un cuadro de trastorno, pero sí puede causarlo si se instala de alguna manera en la mente del sujeto con la categoría de amenaza. A partir de entonces este irá a la cama con el propósito de vencer un obstáculo, de demostrar su eficacia, no de obtener y dar placer. Las  explicaciones ( cansancio, convalecencia, preocupaciones económicas, larga abstinencia, culpa por estar cometiendo adulterio,etc) que pudieron haber sido válidas para el incidente original, se transforman en excusas que nadie cree(empezando por el afectado), cuando el hecho se empieza a reiterar.

Causas orgánicas de disfunción eyaculatoria

Las causas orgánicas de la eyaculación precoz son muy raras. Aunque algunos lo creen, nunca se debe a problemas de frenillo, fimosis, circuncisión, sensibilidad exagerada en el glande, ni cosas parecidas. Igualmente es conveniente, en algunos casos de eyaculación precoz secundaria- es decir, aparecida tras un período de funcionamiento satisfactorio- investigar con el urólogo si existe alguna situación inflamatoria en la uretra posterior (uretritis) o en la próstata( prostatitis)

También en algunos casos, los gérmenes habituales- clamydias y mycoplasmas-, que no producen infección, pueden hacer cosquillas que estimulan intensamente el pene, y en una forma desconocida para el sujeto, al punto de incrementar la velocidad de la eyaculación y muchas veces impedirle dominarla.

Si junto con la EP se presentara incontinencia de orina o de materia fecal, síntomas intestinales o vesicales, es recomendable rastrear los posibles componentes neurológicos mediante una consulta al especialista y la realización de tomografías computadas de la región sacrolumbar. En principio, cualquier enfermedad, traumatismo o  cirugía que interfiera con las vías nerviosas que comandan el reflejo eyaculatorio y su control voluntario puede ser el origen del problema. Obviamente los ejemplos incluyen las enfermedades crónicas de la médula espinal, como son las tabes dorsal, la siringomielia y la esclerosis múltiple.

Otro elemento fisiológico que puede contribuir a la disfunción es la alteración de la circulación sanguínea- por ejemplo- la producida por el tabaquismo crónico que al aumentar el grosor de las arterias impide una adecuada oxigenación de las células-, porque los mecanismos naturales de la erección y la eyaculación dependen en un 80% de la circulación arterio-venosa.

Ocasionalmente, la diabetes , los estados de fatiga y stress y los trastornos del sueño pueden predisponer a una manifestación transitoria de eyaculación asténica.

No sé si porque se sospecha que los tratamientos  de origen psicológico son más largos y complejos, porque el concepto de psiquis remite a la idea de demencia, porque las enfermedades físicas se consideran más dignas, o porque los recursos clínicos o quirúrgicos se ven como más contundentes y veloces, pero lo cierto es que, asombrosamente, la mayor parte de los pacientes parecen desear que se encuentre una causa orgánica a sus dificultades sexuales.

Los Orígenes y efectos del stress

Mucho se habla del stress, pero no siempre con propiedad. La palabra inglesa significa tensión, pero no a la rigidez sino, por el contrario, a la elasticidad psicobiológica que permite a los seres humanos reaccionar ante diversos estímulos, negativos y positivos, y adaptarse a las circunstancias cambiantes. El problema que ha dado mala prensa este recurso defensivo, es que un exceso de demandas- respuestas conduce al agotamiento y la pérdida consiguiente de la elasticidad nerviosa, y es a ese agotamiento al que en la lengua cotidiana se hace referencia con el nombre de stress.

En el área de los trastornos sexuales, los casos de eyaculación precoz- en especial los de las clases secundaria y situacional-pueden muy bien estar originados en un stress malo, descontrolado y , por su parte, aumentarlo a través de la ansiedad que las experiencias decepcionante y el temor al fracaso provocan.

Por si misma , la iniciación sexual y cada una de las “primeras veces”, que se suceden con los cambios de pareja, son motivos de stress, en el sentido de que , por un lado, encarnan un peligro de mal desempeño, dudas, inquietud, y por otro, implican un cambio radical en la vida de la persona. Si a la alarma preliminar le sucede la adaptación correspondiente, estaremos en presencia de la evolución normal del stress “bueno”; si en cambio hacen su aparición el miedo, la tensión, y la autoexigencia, o si el sujeto está stressado por otras razones(económicas, laborales, familiares), es bastante probable que padezca algún trastorno ( anafrodisia, falla eréctil, eyaculación precoz o retardada, anorgasmia) de variable permanencia.

Los problemas del EP repercuten en toda la esfera de las relaciones interpersonales, pero el efecto más importante a nivel emocional es la disminución de la autoestima, lo que vuelve al afectado cada vez más taciturno, desconfiado y desesperanzado.

Tiene enorme peso en el origen y la persistencia el miedo a fallar. Es difícil encontrar un EP que carezca de ansiedad, temor a “la próxima vez”. Es lo que justifica que, en la mayoría de los casos, se adjudique el problema eyaculatorio a factores psicológicos recientes o actuales. En realidad, aunque estén presentes estos factores, lo que hacen es acentuar un problema sumamente complejo y que se debe a la inexistencia de control del reflejo.

“Toco y me Voy” , Eyaculación Precoz, de Juan Carlos Kutnezoff

Conclusiones:

Como explica el Dr Kutnezoff , aunque hay que descartar posibles problemas físicos, generalmente la eyaculación precoz tiene que ver con otras cuestiones, psicológicas mayormente y posibles de tratar. Personalmente creo que además de lo que describe el Dr, es fundamental la compañera que toque en cuestión para salir adelante y no quedar cronificado en una EP permanente, si la relación es casual seguramente va a ser más difícil que la paternaire comprenda, tenga paciencia, busque alternativas o lo tome con humor. Ahora si es una relación más estable, pienso que es más fácil lidiar con esto de a dos, buscando soluciones, terapia en caso de que persista y hasta desestimarlo ya que según el caso podría ser pasajero.

Lic. Dolores Rueda

 

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