Meredith Chivers es una de las principales expertas del mundo en el estudio de la » concordancia sexual», les voy a compartir los resultados de sus experimentos en la Universidad de Queens en Canadá. La concordancia sexual mide el grado de correspondencia entre la respuesta fisiológica de nuestros genitales y la experiencia subjetiva de sentirnos excitados o no. El mensaje fundamental es que los genitales pueden reaccionar a estímulos que la mente no interpreta ni experimenta como excitantes y no ser conscientes de ello.
Lo que hace Meredith Chivers es mostrar diferentes tipos de estímulos eróticos y neutros a hombres y mujeres, medir la respuesta de sus genitales con un pletismógrafo de pene y un fotopletismógrafo vaginal, y tras el experimento preguntarles cuán excitados se han sentido. En los hombres las respuestas y el cambio de grosor del pene suelen estar bien correlacionados, pero entre las mujeres hay una enorme diversidad. Algunas muestran una concordancia sexual idéntica a la de cualquier hombre, pero en muchas otras resulta bajísima. Descubrió también que la mayor concordancia correspondía a mayor nivel educativo y frecuencia de masturbación.Además observó que las mujeres practicantes de meditación o técnicas de relajación solían desarrollar mayor concordancia. Esto es importante porque indicaría que se puede entrenar.¿ Para qué? para disfrutar más de su sexualidad, ya que las mujeres que presentan mayor concordancia se declaran más satisfechas sexualmente.
Resulta especulativo, pero permitiría argumentar que conocer la respuesta de los genitales puede dar información útil sobre algunas fantasías o prácticas que nos pueden atraer sin ser del todo conscientes de ello.
» Los genitales femeninos pueden ser bisexuales aunque ellas no lo sean», agrega. ¿Quien dicta las preferencias es la mente?, o los ¿despistados? genitales. Meredith dice que las mujeres reaccionan genitalmente a un espectro muchísimo más amplio de estímulos sexuales que los hombres. Y uno de ellos son las imágenes eróticas del mismo sexo. Cuando mostraba imágenes de sexo lésbico a mujeres heterosexuales convencidas, la vagina de muchas de ellas se irrigaba con independencia de lo que opinara su mente.(S=EX², La Ciencia del sexo)
Es muy interesante este estudio ya que muestra cuanto hay de construcción en la sexualidad, de contradicción en lo que creemos que nos gusta y lo que no nos gusta y quizás ayuda a pensar a todos los que aún les cuesta tanto y les resulta tan ajena la bisexualidad, la homosexualidad, etc.
Lic. Dolores Rueda